Simplemente escribí, dejé que mis dedos bailasen sobre el teclado y me morí. Y vi qué había más allá de la bóveda celeste. Vi la nada más absoluta que nadie jamás haya contemplado. La oscuridad más aterradora, el vacío más profundo. Y no tuve miedo, por una vez en mi vida.
Desperté. Ayer me dísteis vuestro voto de confianza, insano mundo...
Ayer y cada día me lo dáis, devoto suicida de tus decisiones.
Un día quise escapar de todo, huir, correr lejos y difuminarme con cada paso al frente. Un día tras otro hasta que de verdad encontré la razón para no hacerlo.
Yo. La razón he sido y seré siempre yo.
Att: LadyWinter
Y tras esto me siento en la necesidad de teclear yo también pero sí con una finalidad, el decirte que, tras un largo tiempo (lo reconozco) he vuelto por aquí pero todo sigue igual, tú sigues tan tú y todo es igual de encantador; pero que no se te pegue el egotismo, que tú tenías muchos más temas sobre los que escribir.
ResponderEliminarAtt: Tu fiel seguidor y (espero todavía) amigo, Beeman